¡Hola apasionada de la belleza! ¿Sabías que las manos son una de las zonas que suelen resecarse con mayor frecuencia? Esto se produce por el contacto con diversos químicos como cloro, jabón, gel anti bacterial, etc.
Pero no te preocupes ¡He llegado a salvar tus manitas! En esta ocasión te mostraré paso a paso una exquisita técnica para que luzcas manos de seda.
Paso 1: Exfoliación. El primer paso es exfoliar las manos. Tras humedecerlas, aplica tu exfoliante favorito. Puedes utilizar uno con cáscara de nueces, es muy suave y amable con la piel.
Recuerda que al exfoliar retiras células muertas que se encuentran de manera superficial y ayudan a tus manos, pues esta zona se ve expuesta a diversos factores externos por lo que merece un cuidado especial.
No te olvides exfoliar los nudillos. Recuerda que las manos son una zona en donde se reflejan los signos de la edad, por lo que realizar un tratamiento siempre será beneficioso.
Una vez que exfoliaste, enjuaga con agua fría de preferencia y seca las manos sin frotar. Ahora sí, podrás hacer uso del producto estrella del tratamiento: La Parafina.
La parafina en su estado natural es sólida por lo que deberás calentarla para poder aplicarla, es importante medir la temperatura para no quemar y causar irritaciones.
Aplica una capa muy delgada y poco a poco ve engrosando. Es importante evitar frotar la parafina en repetidas ocasiones pues al hacerlo podría quebrarse.
Coloca otra capa de parafina, aplica en el lateral de los dedos y la mano. Es importante no mover los dedos para que no se quiebre la parafina y puedas dejar una mascarilla uniforme.
Al final aplica una capa para que esta guarde la temperatura y de inmediato gira tu mano. Para terminar esta etapa, coloca un plástico y envuelve tu mano.
Sobre este coloca una capa más que te ayudará a guardar la humedad y el calor ¡cuida que no queden orificios! Una vez terminado espera de 15 a 20 minutos.
Posteriormente retira la mascarilla junto con el plástico ¡Ojo! Procura hacer una capa gruesa para facilitar el retiro de la mascarilla, de lo contrario costará mucho trabajo retirarla.
Retira con una toalla el exceso y evita aplicar agua ya que la parafina deja una película protectora que dará mayor suavidad. Mientras esa película esté ahí, seguirá aportando cebo natural.
Tras retirar, realiza un masaje. Utiliza una crema de manos humectante y protectora. Aplica tanto en el dorso como en la palma y realizar un ligero masaje empezando desde la muñeca.
Continua el masaje por el dorso de la mano haciendo círculos. No te olvides de trabajar los pulgares también en círculo y entre los dedos ¡Listo! Ya tienes manos de seda.
¿Cuáles son los beneficios de este tratamiento?
La piel lucirá más suave, con un color más claro y uniforme. Sentirás mayor humectación, y lo mejor es que no existen contraindicaciones. Para lograr el resultado esperado, lo único que debes cuidar es la temperatura de la parafina.
¿Cuándo ofrecer este servicio?
Puedes ofrecerlo a novias, quinceañeras o personas que tengan manos maltratadas. De hecho, este tratamiento funciona muy bien en época de frío en donde nuestras manos se resecan por las bajas temperaturas.
Video: Haz este tratamiento paso a paso conmigo